El profesor Claudio Álvarez junto a otros colegas pasó el tiempo durante el aislamiento capacitándose para lograr que el regreso sea el adecuando, sin lesiones y poniendo en forma paulatinamente a los jugadores para el inicio de la temporada. 

“Podemos hacer un balance altamente positivo -dijo- cumpliendo como corresponde con todos los protocolos desde el punto de vista sanitario y a eso le sumamos el deportivo cumpliendo al pie de la letra la directivas que emanan de los entes superiores. A eso nos adaptamos con el programa de preparación física en este período preparatorio y los entrenadores con la parte de básquet, pero siempre tomando como premisa el cuidado y mantenimiento de todo lo que hace que podamos seguir entrenando en condiciones normales”.

-¿Qué tareas se van haciendo por estos días y cómo encontró a los jugadores?

-Afortunadamente como nosotros mantenemos el equipo en líneas generales y los que se han sumado como por ejemplo el caso de Lucas Arn ya es un jugador que estuvo acá y conoce la dinámica. Nosotros empezamos el 1 de septiembre a trabajar cada uno en su lugar, por eso que hemos ganado bastante tiempo. Trabajaban obviamente con las posibilidades que tenían en su ciudad con tareas de resistencia al aire libre en forma individual, con todos los cuidados y quienes estaban en ciudades en las que les permitían ir al gimnasio iban. Cuando nos juntamos acá continuamos con los trabajos de resistencia en cancha, usamos la de fútbol, hasta que por protocolo se nos fue dando la posibilidad de usar el gimnasio de musculación respetando que no haya más de dos personas por turno y con la cancha de básquet haciendo trabajos individuales. Siempre tratando de desarrollar fuerza, resistencia, velocidad y la parte de básquet.

-¿Cómo afecta a los jugadores la incertidumbre de no conocer detalles de donde y cuando se jugará la “burbuja”?

-Lo que le genera es un estado de ansiedad porque uno se va preparando mentalmente, canalizando todo el esfuerzo a una fecha determinada. Entonces cuando se modifican esos parámetros le genera momentáneamente una incertidumbre porque uno no termina sabiendo bien para qué está haciendo ese esfuerzo. Nosotros tratamos de convencerlos y que entiendan que tenemos que hacer nuestra tarea al cien por ciento convencidos en que va a ser en la fecha programada. Si se corre nos avisarán de manera tal de poder adaptar la carga del trabajo. Tenemos que tratar de mantenerlos enfocados en que el torneo va a empezar en ese momento de forma tal que los jugadores mantengan su predisposición al trabajo.

-¿Cómo será la adaptación de los extranjeros?

-Nosotros a partir del estilo de conducción que tiene Ariel (Rearte) buscamos siempre la solución. El problema siempre va a estar así que si no lo podemos modificar, no nos puede hacer perder tiempo. Nosotros vamos por la solución y estamos convencidos que los jugadores van a llegar en la mejor forma que ellos lo puedan hacer. Esto es un problema mundial o sea que también los habrá modificado a ellos no me cabe la menor duda. Así que a partir de que ellos estén acá, nosotros tenemos un estilo de trabajo en el cual no forzamos situaciones ni a las personas,  por lo tanto su tarea estará apuntada a que vayan insertándose a la dinámica del equipo y no al revés. Caso concreto los últimos jugadores que se sumaron como Costa (Valentín) y Ortiz (Lucas) si bien están con tareas diferenciadas se van insertando en la dinámica del equipo.

Informe: Prensa Comunicaciones