Club Atlético Boca Juniors

Buenos Aires (Buenos Aires)

LNB · 09 de June de 2020

Boca Jrs.

Los festejos de Boca, campeón de la Copa Argentina 2004

Boca continúa con el repaso de los cinco títulos de Copa Argentina que obtuvo a lo largo de su historia. En este caso revive la edición 2004 del torneo nacional, obtenida ni más ni menos que ante River en la Bombonerita.

Preparación

Luego de la arrolladora temporada 2003/2004, no había gran necesidad de cambios fuertes en el básquet Xeneize. Más bien lo que se imponía era conservar la base campeona y retocar apenas piezas puntuales para que la química no se pierda y se reemplace correctamente a los pocos que emigraron. Paco Festa, Juan Pablo Rotta y Raheim Brown eran las caras nuevas en relación al equipo que había derrotado a Gimnasia en la final de la Liga Nacional, por lo que el conjunto de la Oveja iba por otra Copa Argentina.

Casi siempre había alguna modificación en el reglamento del campeonato respecto a la versión previa. En lo que a la edición 2004 respecta, la Copa Argentina sería disputada por 31 equipos (los 16 de la Liga Nacional más los 15 del Torneo Nacional de Ascenso) con un formato medianamente conocido ya que se emparejarían con algún rival de la otra categoría para definir a los 16 clasificados a doble partido. Obras se metió directamente en la segunda fase ya que Colón (Santa Fe) abandonó poco antes del arranque del torneo.

Ya a esa altura la Copa Argentina era una cuestión de honor para Boca. El Xeneize había ganado las dos primeras ediciones del certamen y poseía un plantel de suma importancia para ser tildado como favorito también en la que estaba por empezar. Eran horas de suma efervescencia y mucho movimiento mediático en el básquet de nuestro país ya que la Argentina de Rubén Magnano ganaba el oro olímpico ante Italia el día anterior a que arranque esta nueva Copa Argentina, por lo que habría más flashes de los normales.

Primera fase

Sionista de Paraná fue el rival que le tocó a Boca en aquella primera fase de la Copa Argentina 2004. Más allá de todos los momentos buenos o malos que tuvo en su paso por la máxima categoría, el equipo de la capital entrerriana por ese entonces se preparaba para jugar una versión más del TNA. Y lo hacía con armas sumamente interesantes para la categoría, tales los casos de Juan Pablo Cantero, Daniel Hure, Alejandro Zilli o un histórico del básquet de esa provincia como el base Santiago Vesco.

A doble partido en Paraná, el Xeneize iba por la clasificación, pero la primera noche no sería fácil ni mucho menos. Ante un estadio colmado (recordemos que Argentina había ganado el oro olímpico el día anterior), el conjunto Celeste sacó pecho y liderado por Juan Pablo Cantero y sus 25 puntos no solamente ganó el encuentro sino que además se quedó con una buena diferencia (78-69) pensando en el segundo y decisivo choque. Paolo Quinteros fue el máximo goleador de Boca con 20 unidades en aquel duelo.

Boca tenía que ganar por diez para clasificarse o por nueve para forzar la prórroga en el segundo partido. No sería nada fácil teniendo en cuenta las virtudes mostradas por Sionista en el primer choque, pero el equipo de Hernández mostró credenciales en los diez minutos iniciales (28-11) e inclinó definitivamente la balanza a su favor. De la mano de los 35 puntos de Quinteros, más el sólido aporte de otros cuatro jugadores en doble dígito anotador, el Xeneize ganó 95-63 y se metió entre los 16 mejores de la Copa Argentina.

Segunda fase

Luego de dejar en el camino a Sionista de Paraná, llegaba otro equipo del TNA al camino de Boca en la Copa Argentina. Ciclista Juninense sería el rival en una serie en la que ya se jugaría un partido en la cancha de cada uno de los dos equipos, por lo que el favoritismo Xeneize en la previa era casi ineludible. El Verdirrojo tenía algún que otro elemento experimentado para la segunda categoría (Carabajal, Casemayor, Bernabei o incluso Fernando Martina), pero el conjunto de la Oveja llegaba a Junín en plena racha positiva.

Pocos días después de dejar en el camino a su clásico rival, Argentino, el equipo de Capelli le planteó un primer cuarto de igual a igual al Xeneize, pero a partir del segundo segmento se empezó a ver quien se quedaría no solo con el juego sino también con la serie. Sin terminar de exigir la máquina en ningún momento, pero con un Quinteros en llamas (32) y la buena compañía de Brown (18), Boca se llevó un 89-78 del Coliseo del Boulevard que prácticamente sentenciaba la llave antes de que se juegue la revancha en el Luis Conde.

El domingo 5 de septiembre trajo una doble jornada de Copa Argentina al barrio de La Boca. En primer turno Obras eliminó a Olimpia de Venado Tuerto mientras que en el duelo de fondo el Xeneize no le tuvo piedad a Ciclista. Boca jamás descanso en los 11 puntos de luz obtenidos en Junín, pisó el acelerador a fondo de entrada y pasó por encima a su rival. La chapa final fue de 92-61 y graficó a las claras la diferencia que hubo entre ambos aquella noche. Objetivo cumplido y a viajar a Paraguay.

Tercera fase

Central Entrerriano de Gualeguaychú sería el primer equipo de Liga Nacional en el camino de Boca en esta Copa Argentina. Siempre lejos de los presupuestos más altos de la competencia y también de las posiciones de privilegio, pero con una fuerte localía basada en un público fervoroso y que también acompañaba de visitante, el Rojinegro prometía darle pelea al Boca de la Oveja que llegaba a Entre Ríos luego de haberse quedado con un Sudamericano de Clubes Campeones que próximamente estaremos repasando.

Boca le tiró los apellidos, la experiencia y un Paolo Quinteros descomunal a su rival en el primer partido jugado en Gualeguaychú para empezar a dominar la serie de entrada. Sin embargo, en el último cuarto el dueño de casa resurgió y se metió de lleno en la conversación, hasta que una seguidilla de libres de Paco Festa aseguró el triunfo Xeneize sobre el final. Fue 90-85 (Quinteros 37) y la vuelta a casa dejó la sensación de que si el equipo de Hernández jugaba como sabía en la Bombonerita no podía quedar afuera del Final Four.

El duelo decisivo dejó ver una laguna en el reglamento de la competencia. Cansado luego de diversos partidos y viajes internacionales, Boca no la pasó bien ante Central Entrerriano y llegó a quedar 6 abajo en el último cuarto, pero forzó el empate en 81 y la prórroga. Raro teniendo en cuenta que clasificaba el que más puntos hiciera en ochenta minutos, pero se jugó el alargue y el Xeneize lo ganó 92-89 con 19 puntos de Raheim Brown como máximo exponente anotador y se metió entre los cuatro mejores una vez más.

Cuadrangular final

Si bien todos los cuadrangulares finales de la Copa Argentina eran emotivos y aseguraban una definición pareja, el del 2004 tenía un ingrediente más en el caso de Boca ya que el Xeneize sería el anfitrión. Sólido y ganador luego de quedarse con la Liga Nacional 2003/2004 y el Sudamericano de Clubes Campeones 2004, el conjunto de la Oveja Hernández encontraba en la localía un aliado más para quedarse con la tercera edición de este certamen. Además, claro está, de su innegable categoría como equipo.

Obras fue el primer rival, pero lo cierto es que poco quedaba de aquel Tachero que tuvo a maltraer a Boca en las semifinales de la Liga anterior. Tal es así que los de Núñez descendieron en aquella temporada de la Liga Nacional, pero lo cierto es que la cosa no fue nada fácil para un Xeneize que lo ganó 83-81 en el minuto final. Raheim Brown (19), Paolo Quinteros (18), Martín Leiva (14) y Fernando Malara (12 más el doble ganador sobre el final) fueron los artífices de una valiosa victoria.

Libertad de Sunchales se había reforzado para la 2004/2005 con la base del Gimnasia subcampeón (Benítez, López, Gonzalo García) más otros jugadores rutilantes como el paraguayo Martínez o Diego Cavaco, por lo que se palpitaba que la cosa no sería fácil para Boca. Y finalmente no lo fue ya que se pudo ver un partido en el que las ofensivas le ganaron largamente a las defensas y en el que el Xeneize lo cerró mejor para quedarse con un ajustado 107-104 de la mano de los 29 puntos de Paolo Quinteros.

Y la definición que todos esperaban, se dio. Boca y River dejaron por el camino a Obras y Libertad y definirían el título a partido único en la Bombonerita. El Millonario recién arribado a la Liga tras ganar el TNA, mientras que el Xeneize iba por otra estrella. Tras treinta minutos para el infarto, el equipo de la Oveja Hernández lo destrabó al final y lo ganó 94-87 con los 18 de Quinteros como máximo goleador en la noche.

Nuevo título para el Xeneize, en este caso el tercero de los cinco que Boca ganó en el torneo que reunía a las dos principales categorías de nuestro basquet. Con varias particularidades que lo hicieron aún más sabroso que otros (lo festejó en casa, derrotó a River en la final), pero con el sello indeleble de un equipo que de la mano de Sergio Hernández fue quizás uno de los más poderosos que se recuerden en la Liga Nacional a lo largo de la historia. La Copa Argentina 2004 se quedó en el barrio de La Boca.

Informe: Prensa Boca