Club Atlético Boca Juniors

Buenos Aires (Buenos Aires)

LNB · 02 de May de 2020

Boca Jrs.

“En Boca sentí que entraba en un mundo diferente”

Gabriel Fernández, histórico jugador de la Selección Argentina que formó parte del grupo de la famosa Generación Dorada, llegó a Boca en el año 1996 siendo muy joven. En esta nota recuerda el título que obtuvo con el club Xeneize.

De la mano del director técnico Julio Lamas, Gabriel Fernández se fue consolidando con el correr de los entrenamientos y los partidos, lo que lo convirtió en uno de los jugadores importantes en la zona de la pintura del Boca Campeón de la Temporada 1996/97, año en el que, además, se inauguró el Estadio Luis Conde.

-¿Qué sentiste cuando te convocaron de Boca Juniors teniendo en cuenta que ya habías jugado en el básquet de elite?

-Jugué en Ferro mi primer año de Liga y, previamente, ya venía jugando en la Selección Argentina, sin embargo, que Boca se interese por mí teniendo un equipo con importantes objetivos que, además, estaba estrenando cancha pues fue el primer año que se jugó en La Bombonerita, me hizo sentir muy bien, sentí que entraba en un mundo diferente.

-¿Y con respecto a tus compañeros?

-Por un lado, el plantel tenía buenos internos como Luis Villar, Jerome Mincy, Byron Wilson, que jugó una temporada espectacular, y yo sabía que iba a aprender mucho de ellos. Luego, de a poco, se fue haciendo un equipo muy bueno, un plantel con jugadores de rol, con jugadores importantes, con estrellas.

-Viajaron a Europa para la pretemporada. ¿Qué recordás de esa gira?

-Fue una gira tremenda, haber jugado contra el Baskonia, en ese momento era el Tau y contra un montón de equipos europeos,  fue fantástico. Pudimos entrenar muchísimo, jugamos muchos partidos y eso nos preparó para lo que venía después. Boca esos años apostó siempre al máximo. Además para mí cada partido era un show, con mi amigo Sebastián “Paco” Festa la pasamos muy bien y realmente nos divertíamos.

-¿Qué rememorás del comienzo de esa temporada?

-Recuerdo los primeros partidos dónde empecé jugando de titular porque Luis Villar estaba lesionado, me acuerdo haber jugado bien, enseguida comencé a tomar ritmo.  Tenía compañeros que te enseñaban, te ubicaban en la cancha, empecé a darme cuenta de que jugar con gente buena te hacía mejor Y eso fue muy importante, fue determinante en mi carrera. Mis compañeros eran muy buena gente y muy buenos jugadores a la vez.

-¿Cómo catalogarías al equipo durante el torneo?

-El equipo era fuertísimo, físicamente fuertísimo, quizás había algunos equipos más talentosos y con mejores jugadores que nosotros, entre ellos podría nombrar a Atenas de Córdoba, pero me parece que nosotros teníamos un juego de equipo y de roles marcado donde todos tenían su momento. Julio Lamas estuvo espectacular ese año como entrenador y creo que marcó en cada uno una huella, como entrenador nos dio todo lo que necesitábamos para jugar bien arrancando con una pretemporada muy convulsionada con muchísima presión, muchísimas charlas, para luego disfrutar el camino hasta que llegamos título y ahí nos pudimos relajar.

-¿Hubo algún otro jugador que te merezca un párrafo aparte?

-Con respecto a la calidad de jugadores que teníamos, cabe destacar a Gustavo Fernández, un base espectacular, un tipo que te ubicaba en la cancha, un entrenador adentro, que te calmaba, siempre te decía que tenías que hacer y con buenos resultados. Con Paco Festa entrábamos desde el banco a revolucionar todo, a jugar lo mejor posible, a ir para adelante. 

-¿Qué significó esa temporada en lo personal?

-Mucho, dar el salto, pasar de ser un juvenil con futuro a ser un jugador prácticamente consagrado. Boca me dio la posibilidad de ser un jugador de primera con 19 años campeón de la Liga. Estoy feliz de haber estado en ese lugar y contento porque salió todo como yo quería. Fue una temporada de aprendizaje y de éxitos inolvidables.

Informe: Prensa Boca Foto: Marcelo Figueras