No es la primera vez que Atenas, el combinado más laureado de todos los tiempos, debe luchar por su supervivencia: en la temporada 2018/2019 debió afrontar los playoffs por el descenso ante Quilmes de Mar del Plata, un examen que superaron con creces tras imponerse a los marplatenses por 3 a 0. La historia fue similar durante la truncada edición 2019/20, campaña en la que Atenas se encontraba en la 16ª ubicación hasta el instante de la temprana finalización de la competencia que interrumpió y dejó sin efecto el desenlace de la temporada regular. 

Es una situación atípica para uno de los gigantes vernáculos, un conjunto que ha brillado con sus figuras a nivel nacional e internacional. Si nos remontamos al pasado y a los inicios de nuestra querida Liga Nacional fue en 1987 cuando Atenas comenzó a destronar el reino que Ferro había construido durante los primeros años. Héctor “Pichi” Campana y Marcelo Milanesio marcaron el camino de aquella primera corona merecida para el club. ¿Sus otros títulos? 1988, 1990, 1991-92, 1997-98, 1998-99, 2001-02, 2002-03 y 2008-09 para completar un reinado de nueve campeonatos, con jugadores estrellas, jóvenes que asomaban con un futuro ilusionante y entrenadores de la talla de Walter Garrone, Rubén Magnano y Horacio Seguí. Gracias a sus victorias, Atenas se consolidó como el mejor de los tiempos. 

Volvamos al presente. ¿Cómo hacer un análisis de esta actualidad? El Griego se enfocó en formar un equipo con jugadores jóvenes y con proyección durante estos últimos años. Para la 2020/21 se desprendió de Franco Baralle, Joaquín Lallana y Mateo Chiarini, quienes dentro de su estructura construían la columna vertebral. Para este inicio apostó a Tomás Rossi, Lucas Machuca, Gastón Córdoba, Matías Martínez, Joaquín Ríos (la mayoría con rodaje en la segunda categoría del básquet nacional), sumó a un jugador con experiencia como Juan Manuel Torres y mantuvo a Leonardo Lema como abanderado del plantel. Un punto débil a resaltar fue la anémica producción de sus extranjeros, quienes no han sido funcionales a su esquema de juego. Sin ir más lejos, durante el certamen actual únicamente Joseph Nzeakor, quien ya había vestido los colores de Estudiantes de Concordia, se mantuvo dentro de la formación titular. Pablo Bruna y Federico Mansilla se sumaron posteriormente y le agregaron una cuota de jerarquía y experiencia. 

Este lunes será decisivo el duelo ante Libertad, unos Tigres que aún cuentan con chances matemáticas para ingresar a la postemporada. Atenas deberá enfocar su energía en contrarrestar el juego de los experimentados Alejandro Alloatti, Daniel Hure, Marcos Saglietti y de su extranjero Latraius Mosley. El Griego es uno de los equipos que menos puntos convierte (73.9) y está dentro de los cinco que más reciben con una media de 80.4 unidades por juego. Su artillería ofensiva pasará por las manos de Nzeakor (15.0 puntos) y de Lema (11.9 puntos), quien se destaca también en la lucha aérea con 6.3 rebotes (4.8 defensivos).