Por Noelia Ortmann

Antoni Vicens Morey nació en España, más precisamente en Palma de Mallorca. Llegó al país para sumarse a las filas de Argentino de Junín y ahora disfruta de un gran momento, es el segundo goleador de su equipo, detrás de Jonatan Slider, con 16.9 puntos de promedio por partido, el máximo rebotero del plantel (7.5) y el segundo en valoración con 19.0. Además se destaca dentro de La Liga Nacional como el cuarto goleador de la competencia y está dentro del Top 10 de eficiencia. 

Sobre este presente, su llegada a Argentino de Junín y la decisión de competir en el certamen nacional, el jugador español sostuvo: "Me siento muy bien en Argentina, en Junín, en el equipo, en Argentino. Estoy muy bien con mis compañeros, con el entrenador, en todo lo que rodea al club y en especial con el rol que tengo. Vine aquí porque lo vi como una gran oportunidad, me dijeron que iba a tener minutos y que podría demostrar lo que valgo y de momento se ha cumplido todo". 

La promesa que lo trajo hasta aquí

"La verdad que estar dónde estamos ahora mismo con doce victorias y con cuatro o cinco, seis partidos que se han definido en lo último, que podrían haber sido para nosotros, me hace estar muy contento de la situación actual. El venir a jugar aquí es una promesa que yo le hice a dos personas que para mí han sido muy importantes en mi vida, que son mis dos abuelos, de parte de mi madre; mi abuelo era un fiel seguidor de toda mi carrera de baloncesto. Era el primero que se enteraba de todos los resultados de cuando estaba jugando en todos los sitios de España por donde he estado, cuando he estado en Austria también. A él lo que más le dolía era que no me iba a ver llegar, triunfar a mi máximo nivel. Ellos dos fallecieron y esto también es una dedicatoria para ellos, llegar a una primera división tan potente como es la Argentina, para dedicárselo todo". 

Su llegada a Argentino

"Llego aquí gracias a mi amigo, Pablo Bertone, con quien jugué en la LEB Oro, la segunda división del básquet español, hace cinco años. Él sabía que yo estaba entrenando muy duro y me puso en contacto con el que es mi agente y a partir de ahí fuimos llamando a la puerta de varios clubes de La Liga, hasta que tuve la gran suerte de que Argentino y Matías (Huarte) vio algo en mí y cuando me confirmaron que me querían, no lo pensé ni dos minutos. De hecho yo estaba jugando en la LEB Plata y decidí venir a Argentina". 

El nivel de La Liga Nacional

"El nivel de La Liga está muy bien. Es una liga muy física y de calidad. Hay jugadores realmente en un gran nivel, Jonatan Slider, de mi propio equipo, es un jugador completísimo que es capaz de leer cuando tiene que jugar él, cuando para el equipo. Jugadores que me han llamado la atención como Fernando Zurbriggen de Obras, muy completo, la verdad que creo que le espera un gran futuro, otros que forman parte de la Selección también, Tayavek Gallizzi, José Vildoza, es un honor jugar con ellos".

Sus comienzos

"Yo empecé tarde a jugar al básquet, a los 14 años. Yo era jugador de tenis, pero un amigo me dijo que con la edad que tenía y con un metro 94 que era lo que medía tenía que intentar jugar al básquet. A partir de allí fue todo muy rápido, empecé y me gustó bastante. Me llamaron de la Selección para jugar un campeonato de España, por comunidades autónomas, de ahí me ficho Estudiantes. El primer año en Madrid con la Selección jugamos un Europeo y fuimos campeones. No pude llegar al sueño de jugar en la Liga Endesa pero he tenido una carrera de muchos años en LEB Oro, LEB Plata, en Austria, en Francia, ahora aquí en Argentina. Es difícil comparar los niveles de las competencias, pero aquí hay equipos, sin ir más lejos Quimsa, por ejemplo, que jugó contra uno de los mejores equipos de ACB el otro día y lo pudo hacer de igual a igual. En la segunda división de España hay equipos que tienen dinero, con extranjeros fuertes y que podrían competir tranquilamente en La Liga Nacional, a buen nivel".

 Enfrentarse a quienes fueron sus ídolos

"Ahora estoy jugando contra Robert Battle, que yo lo veía cuando era chiquitito, él jugó en Mallorca en segunda división y yo lo iba a ver, y el otro día jugué contra él y lo defendí. La verdad que uno mira hacia atrás y ahora me siento orgulloso de poder compartir cancha y competir ante ellos, mirándolos a los ojos y sabiendo que puedo jugar contra ellos, que han sido ídolos para mí. Paolo Quinteros, cuando estaba en Zaragoza, lo veíamos jugar metiendo 30 puntos cada partido; Diamon Simpson, quien está en Quimsa ahora era un ídolo para mí, estuvo jugando en Estudiantes de Madrid, que es donde me formé yo en la cantera, las inferiores como dicen aquí, desde mi casa lo veía, lo fui a ver a la cancha y ahora lo tengo enfrente".

El análisis del presente y futuro de Argentino

"Queremos seguir con nuestra identidad, nuestro trabajo. Somos un club humilde, con un presupuesto bajo. Los objetivos antes de iniciar el torneo eran no bajar de categoría y no quedar en las últimas posiciones de la tabla; todo lo que sea fuera de eso es un éxito rotundo. Tenemos doce victorias y nos quedan si no recuerdo mal nueve partidos, pero los objetivos están más que cumplidos. Los playoffs serían un premio al trabajo y a esta gran temporada que estamos haciendo todos. Matías nos dice que hay que ir partido a partido, que el que jugamos siempre es el más importante. En una liga de tantos partidos, tanta carga física y emocional, que el equipo que está mejor para ese día suele ganar el encuentro. La clave es seguir con nuestra identidad, peleando todos los balones y así más victorias van a caer seguramente". 

Fotos: La Liga Contenidos