Liga Argentina · 10 de Febrero de 2018
“No hemos perdido nunca la ambición de ganar”
El entrenador del Deportivo Viedma, José Luis Pisani, destacó la ambición mostrada por su equipo para lograr la victoria siempre, sin importar las circunstancias, el rival o la cancha. Destacó la importancia anímica del triunfo ante Rocamora el jueves pasado, luego de la caída en el clásico con Atenas: “Teníamos que hacer borrón y cuenta nueva”.
“La victoria ante Rocamora nos deja un buen sabor. Era necesario volver a ganar en casa para mantener el invicto de 12 partidos y, en la parte anímica, volver a ganar después de haber perdido el clásico”, sostuvo Pisani.
Señaló a Rocamora como “un rival con mucho talento en sus manos para anotar, un equipo muy liviano, con muchas vertientes de gol, mucho tiro perimetral y uno contra uno” y agregó: “Venían de anotarle 102 puntos a Atenas en Patagones y teníamos que hacer un planteo defensivo para frenar eso. Creo que funcionó, porque los dejamos en 73 puntos. Eso nos dio la chance real de ganar el partido y mantener el invicto en casa”.
“Era un partido que valía mucho, no solo por los dos puntos en la tabla sino por la parte anímica, porque perder el clásico nos había golpeado muy duro. Los clásicos tienen ese condimento que no solo son los puntos cuando te toca ganar, sino que anímicamente, como nos ha pasado en tres ocasiones, te ponen bien de la cabeza. Pero cuando te toca perder, como el domingo, te genera una frustración importante”, explicó.
Pisani se refirió además al desarollo del juego del domingo en Patagones: "Fuimos muy competitivos, jugamos un primer tiempo muy bueno y en el tercer cuarto Atenas, con energía, con calidad y atacando bien, nos quiebra el juego” y continuó detallando: “Fuimos remándola, nos pusimos a tiro, pero Atenas fue justo ganador”.
Admitió que se sintió la ausencia de Carter, afectado varios días por una fuerte gastroenteritis: “Jugar partidos como éstos sin un extranjero es muy difícil. Pero entendimos que había que hacer borrón y cuenta nueva, fortalecer la parte anímica y se demostró que, sin estar en condiciones óptimas, Nate nos pudo ayudar contra Rocamora y extendió el plantel, que es lo más importante”.
“No hay que ocultar que el equipo está pasando por un mal momento en lo ofensivo. Las lesiones y la misma competencia nos han mermado mucho la parte ofensiva. Hoy estamos con muchas pérdidas, siendo pocos fluidos en ataque, jugando con pocos porcentajes. Pero nunca hemos perdido la línea de juego y la ambición de ganar. Eso nos deja en los primeros puestos de la tabla de posiciones. Hemos jugado 25 partidos y ganamos 18. El mal momento ofensivo se compensa con la fortaleza en defensa, que nos da chances de ganar”, destacó.
Se refirió al próximo encuentro con Rivadavia, en Mendoza: “Vamos a salir con las ganas de siempre para ganar fuera de casa, ante un rival que juega bien y es ordenado. Necesitamos un buen partido defensivo para tener una chance de ganar y traernos un juego de visitante, que sería muy lindo para todos”.
Informe: Prensa Deportivo Viedma