Estudiantes se presentó ante su gente

Una activa participación de la prensa, y la predisposición al diálogo de todos los expositores, dieron un marco ameno y distendido a un encuentro que se extendió por aproximadamente una hora, en cuyo cierre un delicioso ágape completó un evento sumamente especial y favoreció la interacción de quienes se dieron cita en el lugar.

Ante la atenta mirada de casi medio centenar de espectadores, Eduardo Pugnaloni, presidente del CAE, tomó la palabra en primer término, dio la bienvenida al auditorio y dedicó sus expresiones a destacar la vigencia del proyecto basquetbolístico albinegro, que supera los veinte años de labor ininterrumpida, sobresaliendo por animar con notable desempeño cada categoría de la que ha sabido ser parte. Por supuesto, párrafo aparte mereció la mención de los éxitos conseguidos como puntales de dicho protagonismo, y valoró la excepcional temporada pasada, en la que el equipo alcanzó las finales del certamen, y se alzó con el trofeo de Campeón de la Conferencia Sur, un lauro sin precedentes en la segunda división del baloncesto argentino.

A continuación, Cruz Arouxet se hizo del micrófono y comenzó por refrendar que el acompañamiento del público en esta conferencia de prensa, en una jornada a priori inconveniente, era la manifestación tangible de la pasión que simboliza Estudiantes para los millares de olavarrienses que siguen y respaldan al elenco bataraz. Asimismo, el máximo referente del básquetbol del CAE reconoció el apoyo del municipio local y de los patrocinadores que hacen posible sostener la permanencia del equipo a un paso de la élite, aclarando sin embargo que la negativa dada días atrás a compra de una plaza en la Liga Nacional –otrora ocupada por Libertad de Sunchales y ofrecida a nuestra entidad por el mérito deportivo que significó el subcampeonato del Torneo Nacional de Ascenso (TNA)-, fue una decisión afín con la política institucional de priorizar la competitividad y la estabilidad del deporte profesional en el club, en detrimento de dar un salto que, bajo las condiciones actuales de la transacción, seguramente hubieran expuesto al club a afrontar una temporada marcada por un innecesario compromiso financiero, resultado probable de la gestión de un presupuesto varias veces mayor a los administrados en temporadas recientes.

Antes de dar paso al diálogo con la prensa especializada, Diego Robbiani, Secretario de Desarrollo Humano y Calidad de Vida de la Municipalidad del Partido de Olavarría, indicó su satisfacción por representar a la gestión del intendente Ezequiel Galli entre los oradores de tan importante reunión, al tiempo que se pronunció complacido por la calidad del proyecto deportivo bataraz, no sólo en su rol de funcionario, sino como hincha de Estudiantes, lo cual reconoció ante los presentes a modo de aval para su genuino entusiasmo por ver al club de sus amores disputar una nueva edición de un certamen de altísima jerarquía.

Llegó entonces el momento de abrir el intercambio con los periodistas que se presentaron en la sala, y fue el primero en hablar quien pidió una respuesta de Álvaro Castiñeira, el flamante entrenador del conjunto estudiantil. El DT, que viene de una excelente temporada al mando del histórico Ferro Carril Oeste en la Liga A, no dudó en asegurar que su máximo anhelo es lograr el ascenso con Estudiantes. Argumentó que, lejos de temer a lo que podría significar no conseguir el objetivo tras declararlo con tanta elocuencia, entiende que debe ser franco al momento de expresar su convicción de que llega a una organización capaz de obtener el título de la divisional, sin desconocer ni negar que ningún plantel juega solo y la posibilidad de un revés es igualmente viable, más nunca frustrante o definitiva. En idéntico sentido, siempre racional y diligente en sus expresiones, el coach apreció el buen ánimo y la predisposición del equipo de trabajo (cuerpo técnico, jugadores y colaboradores) en el comienzo de las labores de pretemporada; lamentó las ausencias de Patricio Rodríguez y Luciano Tantos en el primer día de entrenamiento, aunque le tranquiliza saber que pronto podrá contar con ellos, y espera lleguen a la ciudad sabiendo que les aguarda un excelente grupo humano.

Al discurrir sobre la ficha pendiente de ocupación entre los jugadores mayores del conjunto albinegro, en respuesta al interrogante “¿nacional o extranjero?”, el nuevo entrenador bataraz adujo que le mayor límite a la contratación de un deportista de jerarquía es su precio, observando que un interno argentino de calidad es más costoso que un extranjero confiable en el mismo puesto, lo que hace pensar que se está más cerca de un fichaje foráneo que de un refuerzo nacido en nuestro país. Sin embargo, Castiñeira insistió en proponer que un equipo oneroso no siempre garantiza el éxito –como bien ejemplificó con sus experiencias recientes en Ferro-, y que percibe una gran parte de la obtención de resultados positivos depende de la resolución apropiada de los conflictos y cuestionamientos internos de todo plantel, donde las diferencias de criterios son cotidianas, y triunfa no quien las erradica, sino quien aprende a dominarlas, pues ellas, de algún modo, hablan del compromiso del equipo con el progreso y la autosuperación en el contexto de la competencia.

Aunque a la mesa se arrimaron Castiñeira, como entrenador, y Alejo Montes, el nuevo escolta mayor, cabe destacar la importancia de la conservación de una buena base de jugadores que formaron parte del conjunto finalista del pasado TNA. Joaquín Gamazo, Santiago Arese, Agustín Brocal (U23) y Andrés Lugli (U23), además de Ignacio Galardo (también U23, hoy en Asia, como pivot del seleccionado nacional que disputa los Juegos Universitarios de Taipei), tendrán por tarea orientar al grupo y asimilar rápidamente a los nuevos compañeros, entre los cuales sobresale Tantos, quien cuenta con un exitoso paso previo por el Parque Guerrero, donde alzó la copa de campeón del Torneo Federal en 2014, título que valió el regreso del CAE al Torneo Nacional de Ascenso.

Informe: Prensa Estudiantes