Todo Básquet · 30 de Abril de 2017

El Canarias de Richotti, campeón de la Champions League

¡Campeón de la Basketball Champions League! El Iberostar Tenerife escribe una página de oro en su historia, tras vencer al Banvit en un partido que tuvo que pelear hasta el último segundo. Marius Grigonis (18 puntos) y Davin White (14), los mejores.

El Iberostar Tenerife se ha proclamado campeón de la Basketball Champions League tras imponerse al Banvit turco (63-59), en un partido en el que los dos equipos lo dieron todo hasta el final . Marius Grigonis, con 18 puntos, y Davin White, con 14, fueron los líderes ofensivos del conjunto aurinegro.

Ahora sí, había llegado la hora de la verdad. Canarios y turcos estaban dispuestos a convertirse en el equipo que levantara por primera vez el trofeo de la Basketball Champions League y, además, hacer historia por partida doble. Los locales, al conseguir su primer título y los visitantes, estrenándose en Europa.

En un Santiago Martín hasta arriba, con una afición entregada a su equipo y dispuesta a disfrutar al máximo, Txus Vidorreta puso en pista de inicio a San Miguel, Grigonis, Hanley, Doornekamp y Bogris.

Tras hacerse con el primer balón, hasta tres opciones tuvo el Banvit para inaugurar el marcador, pero la defensa aurinegra quería mostrar desde esos primeros segundos que estaba dispuesta a complicar mucho el trabajo de su rival.

También erró Iberostar Tenerife su primera oportunidad, siendo un 2+1 de Orelik el que puso los primeros guarismos en el marcador, para igualarlo inmediatamente Grigonis con un lanzamiento desde más allá de 6,75.

Y dos nuevos triples, uno de San Miguel y otro de Grigonis, anulaban de nuevo la ventaja rival para poner por primera vez por delante al conjunto aurinegro, cuando estaba a punto de alcanzarse el minuto 5 de partido (9-5).

Los de Vidorreta, que había cambiado prácticamente a todo su quinteto para no perder intensidad, mantenían a raya a la estrella del Banvit, un Jordan Theodore que no conseguía ver aro, lo que obligaba a sus compañeros a doblar esfuerzos.

Así, fue una canasta sobre la bocina de Jeremy Chappell la que dejó el marcador al final del primer cuarto en 16-12.

Recuperación turca

El acierto exterior del equipo aurinegro se mantuvo en el arranque del segundo cuarto (3 de 6). En esta ocasión, de la mano de Ferran Bassas, era un nuevo triple el que establecía la máxima ventaja aurinegra en 7 puntos (19-12, m.11,5). Pero también llegaban los puntos dentro de la zona, con la perfecta lectura de Davin White, que veía liberado a Fran Vázquez para culminar el alley oop pocos segundos después (21-14).

A todo esto, había que unir la enorme intensidad que estaba desplegando en la pista un Tariq Kirksay que robaba balones y estaba atento al rebote, además de anotar y forzar falta personal para volver a ampliar la brecha en el marcador (23-14, m. 13).

Fue en este momento cuando la maquinaria turca comenzó a funcionar mejor y Theodore a encontrar su sitio en la pista. Con un parcial de 0-7, el Banvit volvía a respirar muy cerca de su rival (23-21), obligando al técnico aurinegro a parar el encuentro para recomponer a su equipo.

El juego se había igualado. Al triple de San Miguel, respondía Kulig también desde el 6,75, y una nueva canasta de Korkmaz empataba el marcador en el minuto 16 (26-26). Pero el Iberostar Tenerife movía bien el balón y seguía encontrando triples liberados, lo que le sirvió para no perder el mando en el electrónico.

Así, el encuentro alcanzó el tiempo de descanso con 34-31 en el marcador, después de una canasta sobre la bocina de Kulig. Todavía quedaba mucho por decir por parte de ambos conjuntos en una segunda mitad en la que saber contener los nervios iba a ser fundamental.

Niang se destapa en el tercer cuarto

Con 20 minutos por delante, ambos conjuntos regresaron a la pista dispuestos a todo. Tras algunas imprecisiones en los dos lados de la pista, las defensas volvieron a convertirse en protagonistas.

El ambiente se caldeaba más con el correr del tiempo, mientras un Javi Beirán de pie tras el banquillo de los suyos, reflejaba el nerviosismo que parecía atenazar al Iberostar Tenerife en el arranque de este tercer cuarto.

Tardaba en llegar la primera canasta del periodo, siendo el Banvit quien la lograba, además de aprovechar una técnica a Rodrigo San Miguel para volver a empatar el encuentro en el minuto 24 (34-34).

Fue cuando volvió a funcionar el tiro exterior canario cuando la situación volvió a ponerse de cara para los anfitriones de esta Final Four. Sendos triples de Doornekamp y Grigonis, lanzaban de nuevo al Iberostar Tenerife y volvían a poner de pie a una afición que no dejaba de animar un solo segundo.

El 40-34, además, provocó que el técnico del equipo turco solicitara un nuevo tiempo muerto para intentar frenar la reacción de los isleños. Fue en ese momento cuando apareció en pista Mamadou Niang y lo hizo a lo grande, anotando dos puntos más con un poderoso mate que situaba al conjunto aurinegro de nuevo 8 arriba (42-34, m.25).


Además, el pívot senegalés se hacía presente en cada jugada: defendía con intensidad, taponando y reboteando cada vez que tenía opción, además de seguir poniendo el espectáculo con un nuevo mate (49-40, m. 28).

Pero todavía quedaba sufrir. Cuatro puntos consecutivos de Theodore culminaban un parcial 0-6 del Banvit a seis segundos para el final del periodo, que volvía a apretar el marcador (49-46).

Vidorreta pidió un tiempo muerto para diseñar una última jugada que salió perfecta, culminada por un canastón de White sobre la bocina que cerraba el cuarto con 51-46.

Llegó la hora de la verdad

En esta ocasión, sí fue el Iberostar Tenerife el que inauguró el marcador del último cuarto, gracias a una canasta de Georgios Bogris. Aunque no bajaba la intensidad defensiva, su rival no estaba dispuesto a tirar la toalla y, con dos triples consecutivos, volvía a ponerse a sólo dos puntos de distancia (53-51, m. 32,5).

Tocaba sufrir y mucho. Los minutos corrían a favor del Iberostar Tenerife, pero el trofeo no tenía todavía un dueño claro. Grigonis volvía a dar aire a su equipo (55-51) y Theodore recortaba de nuevo (55-53), aunque la figura del equipo turco falló el tiro que hubiera puesto por delante a su equipo y, tras el error, Marius Grigonis de nuevo anotaba un triple que alentaba todavía más a una afición enfervorizada (58-53, m. 35,5).

Fue en ese momento cuando los nervios parecieron atenazar al equipo amarillo. Tiros precipitados y errores defensivos, permitieron al Banvit volver a recuperar la diferencia y, gracias a una canasta de Kulig, ponerse a solo un punto (58-57, m.38).

Pero a Davin White no se le encogió el brazo. Primero desde la línea de personal y después desde más allá de la línea de 6,75, sumó cinco puntos consecutivos para dejar el marcador en 63-57 a 1:01 para la conclusión.

Con 63-59, tras canasta de Orelik, el Banvit presionaba a toda pista, sin hacer falta personal y obligando al Iberostar Tenerife a apurar su posesión. Doornekamp falló el triple y Abromaitis se hizo con el rebote, pero el balón salió despedido y dio una nueva opción al Banvit, que falló un nuevo tiro, haciéndose Abromaitis con un rebote que sentenciaba, ahora sí, el partido y daba al equipo aurinegro el título de campeón.

El desafío estaba cumplido. Iberostar Tenerife ha hecho historia.

Informe: Prensa ACB.

Sponsors Oficiales