Los jugadores Xeneizes se tomaron un respiro luego de un arduo entrenamiento supervisado por el técnico Guillermo Narvarte y fueron a compartir una tarde diferente con los estudiantes de la Escuela Primaria Carlos Vignale.

Un gran alboroto se armó cuando los chicos, que estaban disfrutando del recreo, vieron entrar a los basquetbolistas. Los niños corrieron a saludarlos y, con la admiración reflejada en sus rostros, los atosigaron a preguntas y a pedidos de autógrafos.

Ante tanta algarabía, la profesora de Educación Física Liliana Sac y la Directora de la Institución María Cristina Lugones les pidieron a los chicos que se sentaran en el patio y les dieran la bienvenida a los visitantes con un gran aplauso.

Luego los jugadores profesionales de Boca se presentaron, contestaron la catarata de preguntas de los chicos y armaron grupos con los que realizaron distintas actividades relacionadas al básquet, como picar la pelota o tirar al aro.  

Al finalizar los jugadores de Boca que defienden la camiseta partido tras partido dejaron sus impresiones acerca de la actividad realizada.

Por su parte Lucas Gargallo dijo: “Para mí fue una experiencia muy linda el haber compartido un momento con los chicos, la pasaron muy bien, nos prestaron mucha atención, nos divertimos juntos. Ver a los chicos tan felices nos encantó y nos fuimos muy contentos”.  A su vez Jasiel Rivero comentó: “Me sentí súper bien con los chicos, me encantó la visita y la charla con ellos. Si se puede seguir conociéndolos sería perfecto, pasamos muy buenos momentos”.

Y para finalizar Roquez Johnson aseguró: “Disfruté el contacto con los chicos en la escuela. Tengo hijos propios y siempre es bueno instruirlos. La energía  con los chicos era genial, podía sentir la emoción en su voz y en sus acciones. Quizás esta visita les sirva de influencia para que se  conviertan en jugadores de básquet. Fue fantástico aportar conocimientos a las generaciones más jóvenes”.

 

 

Informe: Prensa Boca