Lucas Pérez, Cristian Amicucci, Agustín Caffaro, Fernando Funes, Tomás Cavallero y Fotios Lampropoulos fueron los encargados de motivar a los niños a través de la interacción directa. Ellos, integrantes de la elite del básquet boquense, crearon un vínculo de identificación con los niños e intentaron transmitirles sus conocimientos y enseñarles algunos secretos, dado que para los pequeños, son un espejo de superación y de motivación.

Practicaron, entre otras cosas, como subir y cubrir el balón mientras pican la pelota, mecanismos y visión para un buen pase y técnicas para encestar foules.

Luego se divirtieron mucho jugando uno contra uno y, para finalizar la práctica, se dividieron en grupos de cinco y los pequeños tuvieron la posibilidad de compartir la cancha con los integrantes del plantel de la Liga.

“La experiencia fue muy positiva” nos dijo Walter Jara, entrenador de los niños “los jugadores mayores tuvieron la mejor predisposición” y agregó: “Es bueno que los jugadores de elite tengan contacto con las categorías formativas del club”. Repasando la velada el técnico reflexionó: “Los chicos comienzan por divertirse y aprender, soñando llegar a jugar en la primera del club. Se los notó realmente muy contentos, fue una tarde inolvidable para los más chiquitos”.

Otro de los responsables de la categoría, Gonzalo Pérez, alias “el Polaco” aseguró: “La actividad estuvo muy buena, fue algo distinto para los chicos. Muchos de ellos no tienen la posibilidad de ir a la cancha y estar cerca de sus ídolos, entonces el hecho de que sus referentes vengan a entrenar con nosotros, es hermoso” y añadió: “Ojalá que esto sirva para incentivar a los chicos, que tengan como objetivo algún día ser como ellos” y concluyó: “Me parece que fue una jornada muy buena, compartir con jugadores nacionales y extranjeros de primer nivel es algo distinto”.

Lucas Pérez, capitán del equipo de la Liga Nacional manifestó: “me siento muy feliz de haber venido. Nos divertimos con los preminis, jugamos con ellos y pudimos pasar un lindo momento. Algunos de los chicos nos vienen a ver a la cancha, y ésta también es una forma de devolverles ese cariño que nos brindan todas las fechas en La Bombonerita”.

Fernando Funes, otro integrante del plantel, reconoció: “Fue un  momento lindo el compartir un rato con los chicos. Jugamos y nos divertimos mucho y ver sus caritas de felicidad y cómo disfrutaban cada segundo nos llena de placer”, y concluyó: “fue una hermosa tarde junto a los chicos”.

Que esas dos realidades se encuentren en una actividad que terminó en un partido mezclando jugadores de Liga y preminis en un mismo equipo, es inolvidable para todos.

Informe y foto: Prensa Boca